Por: Alicia Cascaret
Mundo 20/20 nos convoca esta semana a analizar la crítica situación que vive la nación sudamericana de Perú tras la destitución del legítimo presidente, Pedro Castillo.
El periodista Julio César Mejías junto a su colega y analista político peruano,Gustavo Espinoza examinan los hechos .
“¡Cuídate de la víctima a pesar suyo,
del verdugo a pesar suyo
y del indiferente a pesar suyo!
Estos versos fueron escritos por un notable poeta conmovido por el infinito dolor que dejó en toda una generación de la derrota de la República Española, aquel Primero de abril de 1939.
El presentador los trae a colación porque su autor nació precisamente en la nación a la cual dedicaremos nuestro análisis. César Vallejo y por supuesto su país de nacimiento, Perú, inmerso desde hace semanas en una grave crisis generada por la destitución y encarcelamiento del legítimo presidente Pedro Castillo.
Para numerosos activistas sociales, líderes indígenas y diversos analistas, resulta evidente que la oligarquía nacional peruana y sus aliados en Estados Unidos no aceptaron en ningún momento el triunfo electoral de Castillo, un maestro rural que no representaba los intereses ni de las grandes fortunas nacionales ni de los grupos económicos extranjeros.
Al igual que Vallejo casi un siglo atrás, hoy los movimientos sociales peruanos han visto destrozadas sus esperanzas y no tienen consuelo tras la muerte de casi tres decenas de compatriotas durante las manifestaciones acontecidas tras lo que denominan un golpe de Estado contra Castillo.
De un lado la inexperiencia política, la falta de un equipo propio y de un proyecto de país. Del otro, una Derecha herida, ávida por sacar a como fuere a Castillo, una patronal cargada de codicia, odio racista y clasista, que convierten a Perú en una las naciones de mayor desigualdad económica y social en América Latina.
Así comenzó el periodista Mejías para luego darle paso vía online a su invitado
El invitado comienza su exposición analizando los puntos débiles del gobierno de Castillo como la precariedad, la falta de definición ideológica y política, la carencia de un programa definido que no fue asimilado por el propio Castillo ni por las fuerzas que lo apoyaron para sumir el poder en segunda vuelta.
Otro aspecto es el de los movimientos populares que fue calificado por el invitado como un movimiento débil, con poca nivel de unidad. Sumando a ello la precariedad de las organizaciones sociales y de masa. “ En el Perú el neoliberalismo quebró la organización sindical al privatizar muchas empresas y destruir el aparato productivo del país ” dijo Espinoza.
Se refirió al crecimiento del comercio informal que alcanzó el 80 % del país.
Calificó la destitución de Castillo como un golpe de la oligarquía y la patronal con el fin de restablecer el dominio del Perú oligárquico en el plano político e ideológico y el orden clasista excluyente, discriminatorio, que caracteriza la clase dominante en Perú.
Espinoza señaló que no se trata de un golpe militar sino de un golpe parlamentario.
El periodista Mejías señaló que pese a la fuerte represión dirigida por el gobierno de facto, encabezado por Dina Boluarte, las protestas populares contra el derrocamiento de Pedro Castillo no se han detenido
Protestas, criminalizadas injustamente por los grandes medios del poder mediático, y que además de exigir la liberación de Castillo, la disolución del Congreso y la salida de Boluarte, insisten en el llamado a nuevas elecciones para la renovación de todos los cargos.
Una encuesta realizada por Ipsos Perú revela que 62 por ciento de la población está de acuerdo en un adelanto de los comicios. Pero la clase política presente en el actual Congreso prosigue con sus malabares para impedir una reforma constitucional, que, entre otros puntos, modificaría la duración del mandato presidencial y el parlamentario.
Las acciones antipopulares del Congreso no han impedido la reacción en las calles, que siguen encendidas para exigir el adelanto de nuevas elecciones, pese a la fuerte represión que ha dejado un saldo de casi tres decenas de muertes.
Lo singular de las protestas es que confirman que el país sigue dividido entre el ‘limacentrismo’ –vencido sorpresivamente en las urnas por Castillo– y las regiones.
“Se trata de una dictadura parlamentaria, de un régimen de fuerza que instaura un poder que está fuertemente arraigado en el Congreso de la República”, consideró el analista político Espinoza.
Al referirse a la posibilidad o no de alcanzar una reforma constituyente el invitado dijo: “mientras no se logre cambiar el escenario político, mientras se logre consolidar el orden de Dina Boluarte con el apoyo de la cúpula castrense, no serán posibles los cambios progresistas”.
La Constitución peruana es la consolidación del modelo neoliberal , según apunto Espinoza. Se refirió a que esa Constitución está siendo modificada para hacerla aún más neoliberal, más represiva y más autoritaria y discriminatoria de lo que es.
Sobre el injerencismo de Estados Unidos en el país consideró siempre se ha creído es una pugna entre la derecha y la izquierda, entre la oligarquía y el movimiento popular como si el imperialismo no existiera.
Se refirió a la actitud o papel de la embajadora de Estados Unidos en Perú, quien tiene en su haber su labor como diplomática de primera línea en Iraq, trabajando con las fuerzas de ocupación en ese país árabe, también perteneció a la CIA. ”Sospechosamente visitó el Palacio de Gobierno el 6 de diciembre y se entrevistó con el director del ministro de defensa “ destacó Espinoza.
El invitado dio a conocer que el gobierno actual tiene entre sus planes echar a un lado a las personas contestarías “está buscando utilizar el mecanismo de la guerra sucia: desaparición forzada de personas, ejecución, tortura …” , entre otros métodos, para imponer su dominación en contra de la voluntad ciudadana. Pero todavía hay una gran resistencia del movimiento popular”, concluyó.
