El Día Mundial del Braille se celebra cada 4 de enero, la fecha busca concientizar sobre la importancia de este medio de comunicación para las personas ciegas o con situación de discapacidad visual.
En noviembre de 2018 la Organización de Naciones Unidas (ONU) reconoció este lenguaje de escritura táctil que, a través de puntos en relieve, representa letras, números, signos de puntuación, símbolos matemáticos, incluso, notas musicales.
La importancia del sistema radica en su capacidad para brindar autonomía y acceso a la información a seres humanos invidentes y de visión disminuida, permitiéndoles leer y escribir de forma independiente. Además es fundamental para la integración social, educativa y laboral, pues les proporciona herramientas para el desenvolvimiento en la sociedad de forma plena.
Louis Braille fue su creador, él perdió la vista a temprana edad a causa de un accidente. Inspirado por la técnica de lectura nocturna, invento del militar galo Charles Barbier de la Serre. Este joven francés desarrolló una mejora basada en la combinación de puntos en relieve que posteriormente fue llevado a lo que conocemos hoy en día como cecografía.
El alfabeto braille consiste en celdas de seis signos generadores, como también se les llama, organizados en una matriz de tres filas por dos columnas. La presencia o ausencia de puntos permite la codificación de los símbolos, de manera que se obtienen 64 combinaciones diferentes.
Un faro en la oscuridad
Cuba muestra su compromiso con el apoyo a las personas con ceguera parcial o total al facilitar un instrumento indispensable para la inclusión y el empoderamiento de las personas con limitaciones visuales.
En la actualidad, Cuba cuenta con la Asociación Nacional del Ciego (ANCI), organización reconocida por su labor en la promoción de programas de incorporación y accesibilidad para ciudadanos privados del sentido de la vista y con visión residual.
Entre los principales logros de la ANCI figura el Centro Nacional de Rehabilitación para Ciegos, donde se atienden y adiestran miles de invidentes nacionales y foráneos. Igualmente organiza festivales de literatura, danza, música y teatro. En el ámbito deportivo son habituales los triunfos de atletas en situación de discapacidad, incluso en los Juegos Paralímpicos y campeonatos mundiales.
La asociación dispone, además, la imprenta que posee una biblioteca de más de 7000 títulos y reproduce diferentes publicaciones seriadas como el Boletín ANCI y la revista Faro en braille y tinta.