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Casa de las Américas: un espacio de unión

Por: Cynthia Ibatao Rui

En un momento complejo para la Revolución Cubana, justo después del triunfo, fue creada por el Comandante en Jefe Fidel Castro y la heroína del Moncada Melba Hernández,  La Casa de las Américas el 28 de abril de 1959.

Muchos países latinoamericanos comenzaron a dar la espalda a Cuba, y era en la cultura donde estaba la herramienta de unión que podía salvar estas relaciones. La única forma de que la mayor de las Antillas continuara existiendo para el mundo era concretar en una institución las acciones de difusión, investigación y premiación de la obra de los artistas e intelectuales de la región. Justamente eso es La Casa de las Américas.

Esta visión integradora le dio la capacidad a La Casa en varios ámbitos de la cultura, de que el territorio insular estuviera presente en todos los países de América Latina. Las primeras líneas de trabajo estuvieron encaminadas a las áreas tradicionales de las artes: literatura, música, teatro y artes plásticas, dirigidas por grandes personalidades de la cultura cubana y del resto del mundo.

Además, acompañando este desarrollo, fueron emergiendo los eventos que prestigiaban a la institución. Entre ellos se puede mencionar el Premio Literario Casa de las Américas, primer gran hecho cultural del centro; y el fondo editorial Casa de las Américas que actualmente cuenta con más de 16 colecciones literarias.

A la par de estos departamentos, La Casa fue advirtiendo de la necesidad de crear centros de estudios que visibilizaran regiones particulares y los problemas sociales de cada una, entre ellos el Centro de Estudios del Caribe, El Programa de Estudios sobre la Mujer, y el Programa de Estudios sobre Latinos en los Estados Unidos por solo mencionar algunos.

Desde enero comenzaron las actividades de festejo al aniversario con la presentación del libro «Hay que defender la vida» y el concierto del trovador chileno Manuel García.

Hablar hoy, después de 65 años de La Casa de las Américas, amerita reconocerle un lugar dentro de la gestión de una politica cultural para Cuba y para el mundo.

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