Ansiosos por adelantar «la luz al final del túnel» y conocer alguna información que permita dilucidar el final posible de la contagiosa y agresiva COVID-19, muchas personas preguntan sobre las condiciones que permiten a un país declarar el fin de una pandemia en su territorio.
En la conferencia de prensa diaria ofrecida por autoridades del Ministerio de Salud Pública, el doctor Francisco Durán García, director nacional de Epidemiología, fue enfático al precisar que el fin de la pandemia en un país se confirma cuando ha transcurrido el tiempo equivalente a dos periodos de incubación del virus (28 días) que la provoca, luego de diagnosticado positivo el último paciente.
Igualmente, explicó que en el mundo «la pandemia se considerará cerrada, una vez que en la última nación se haya cumplido con los dos periodos de incubación sin reportar casos».
Durán García, afirmado como el vocero del Minsap para la actualización médica sistemática respecto a la propagación de la COVID-19 en Cuba, aseveró también que la comunidad científica de la Mayor de las Antillas trabaja afanosamente en desarrollar otras variantes de enfrentamiento asistencial a la enfermedad, tales como nuevos tratamientos, candidatos vacunales, etcétera, que serán informados próximamente en el programa televisivo Mesa Redonda.
Compartió, además, algunas estadísticas de las enfermedades que pueden complicar el estado de un paciente contagiado con la covid-19 y que, de no estar compensadas, las posibilidades de una evolución crítica o desfavorable aumentan.
«En Cuba, según los estudios realizados, existe un 10 % de la población que padece de diabetes, el 30,9 % es hipertensa, y el 23,7 % sufre de asma bronquial», dijo, y agregó que, de las diez primeras causas de muerte, nueve son por enfermedades crónicas no transmisibles.