En un vibrante espectáculo celebrado en el célebre Estadio Latinoamericano de la capital, los seis equipos clasificados para la tercera edición de la Liga Élite del Béisbol Cubano se reforzaron la víspera.
Las Tunas, Pinar del Río, Granma, Industriales, Santiago de Cuba y Ciego de Ávila intentaron cubrir sus puntos débiles. Aunque todos lucen ahora una mejor escuadra tras incorporar a los 10 nuevos integrantes, no todos lograron resolver completamente sus deficiencias.
Hacer predicciones sobre lo que podría suceder en este torneo selectivo, como el cubano, es complicado. En cualquier momento, algunos jugadores pueden salir a cumplir contratos en ligas profesionales y no todos los refuerzos logran adaptarse a su nuevo entorno, en medio de los problemas económicos del país.
Sin embargo, tomando en cuenta las listas actuales y desde una perspectiva personal, cuatro equipos salieron beneficiados en esta mágica noche, donde en tan solo un par de horas resolvieron gran parte de sus problemas.
Estos equipos son Industriales, Las Tunas, Pinar del Río y Ciego de Ávila. Según mi opinión, supieron interpretar mejor sus necesidades, tuvieron más suerte en el orden de selección o disfrutaron del privilegio de elegir a jugadores que expresaron tras bastidores su deseo de no ser seleccionados por otros equipos.
Industriales tuvo una noche exitosa, al captar a dos integrantes de la selección nacional: el receptor Andrys Pérez y el torpedero Erisbel Arruebarrena. Además de reforzar la línea central, recuperaron al alma del equipo (Yosvani Peñalver), consiguieron un bateador de lujo (Dennis Laza) y un cerrador como Armando Dueñas, quien tiene uno de los brazos más poderosos de Cuba.
Las Tunas, doble campeón nacional, debe estar de plácemes. Más allá de su fuerte ofensiva, seleccionaron inteligentemente a un receptor defensivo (Nelson Batista), un utility de cuadro de alto rango (Luis Vicente Mateo) y varias piezas de calidad para fortalecer su montículo, punto neurálgico del equipo de los leñadores.
Pinar del Río, anticipando la salida de sus dos estrellas en la lomita, cubrió bien esas ausencias con lanzadores como Yunieski García y Geonel Gutiérrez y un cerrador veterano como José Ángel García, líder histórico en juegos salvados del béisbol cubano. Además, elevaron el nivel del cuadro y los jardines con el experimentado Dainier Gálvez y Yasiel González, respectivamente.
Ciego de Ávila, golpeado por una avalancha de renuncias a principios del año, volvió a ser un equipo competitivo al reforzarse en casi todos los frentes. Jugadores de cuadro como Rodoleisis Moreno y jardineros como la leyenda Frederich Cepeda y el talentoso Luis González serán ahora Tigres que contribuirán significativamente. En el montículo, añadieron a un gran rescatista como Yankiel Mauri y dos abridores como José Isaías Grandales y Osdany Rodríguez, quienes sin duda contribuirán a varios triunfos.
Granma, aunque adquirió lanzadores de calidad como Alain Sánchez, Noervys Entenza y Yanieski Duardo, y un excelente receptor como Andy Cosme, aún tiene deficiencias en el cuadro y carece de un par de bateadores que refuercen su ofensiva.
Por último, Santiago de Cuba, aunque seleccionó acertadamente a José Amaury Noroña para aumentar su poderío ofensivo, tiene carencias en el bullpen. Sin embargo, logró reforzar posiciones cercanas a las almohadillas con la presencia de Jeison Martínez y José Ángel Sánchez.
La última palabra, aunque suene a cliché, se dice en el terreno. A partir del próximo 15 de marzo se dará la voz de juego y tendremos más elementos para pronósticos y vaticinios. Nos vemos en el estadio.
Fuente: PL
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