Por Yodeni Masó Aguila
Veinte años después, Juan Miguel González comparte sus memorias de la llegada a Cuba junto a su hijo Elían y el primer pensamiento al evocar hoy aquella jornada es para el líder histórico de la Revolución, Fidel Castro.
En la sala de la casa, en su ciudad natal a más de 120 kilométros al norte de La Habana, González ratificó a Prensa Latina la gratitud eterna al Comandante en Jefe, Fidel Castro y a todo el pueblo cubano por acompañarlo en la batalla por el derecho ciudadano de proteger, educar y brindar cariño a su hijo.
La historia del niño Elián González demostró a principios de siglo XXI la unidad y continuidad revolucionaria de la mayor de las Antillas frente a las maniobras de la oposición anticubana en Estados Unidos, quienes fallaron en el intento de separar a un hijo del amor de su padre.
Durante más de 260 días, los habitantes del archipiélago cubano y amigos de la solidaridad no detuvieron la marcha y el reclamo hasta devolver a resguardo de Juan Miguel al pequeño Elián y celebrar todos el arribo a la Patria el 28 de junio de 2000.
El joven Elián es hoy ingeniero industrial, en breve será padre y acompaña el proyecto socialista de la revolución; sin embargo, Juan Miguel no entiende por qué aún persiste en Estados Unidos el odio y la represalia hacia la isla antillana y ‘cualquier hecho lo convierten en política, tergiversando lo sucesos’.
Criticó las manifestaciones y la opresión contra los afroamericanos en el propio territorio estadounidense, al tiempo que significó la cooperación médica cubana, protagonista en la actualidad en el enfrentamiento a la pandemia Covid-19.
Dos décadas separan en el tiempo la lucha de Cuba por el regreso de Elián y aún la familia sufre de ofensas, de manipulación y del rencor que desde el seno de los Estados Unidos cuestionan hasta la noticia de mi hijo ser padre, manifestó a Prensa Latina.
Entre lágrimas y voz rasgada, Juan Miguel reiteró el sentido de pertenencia de su familia con el pueblo y como en otras oportunidades recordó que su hijo Elián es el hijo de toda Cuba.