Foto: Fide.com
Por: Carlos Durán de la Cruz
Victorias de Luis Ernesto Quesada y Elier Miranda en las mesas 2 y 3 brindaron a Cuba un triunfo de calidad en la octava ronda de la Olimpiada de Ajedrez, con sede en Hungría.
En el Torneo Abierto, los antillamos (35) celebraron frente a Israel (20 del ranking) con marcador de 2,5 a 1,5 puntos. En la primera mesa Carlos Daniel Albornoz (2 579 ELO) se levantó con dignidad al empatar con Maxim Rodshtein (2 600) en una partida donde el antillano llevó piezas blancas.
Luis Ernesto Quesada (2 578) puso voltaje alto para remontar su actuación y le ganó a Ido Gorshtein (2 543). Le secundó Elier Miranda (2 512) frente a Tamir Nabaty (2 640). La victoria elevó a Elier como protagonista de la selección y ya también en el coeficiente. Pero en la última mesa Omar Almeida (2 492) no logró mantener las buenas prestaciones que acumulaba y perdió ante Ilia Smirin (2 535).
En el Torneo Femenino las cubanas (29) enfrentaron a Irlanda (60) en un empate de mal sabor. Maritza Arribas (2 143) sigue ponente, se recuperó de su único traspiés y despachó a Diana Mirza (1 962) en 38 jugadas. Yerisbel Miranda (2 294), tercera en el orden de las cubanas, se empleó a fondo para aprovechar una estrategia larga y en 66 movimientos superó a Antonina Gora (1 943).
La fuerza y peso de medirse a primeros tableros siguen costándole a Oleiny Linares. La santiaguera (2 201) inclinó su rey ante Trisha Kanyamarala (2 179) a pesar de conducir las piezas claras. También cedió Ineymig Hernández ante Lara Putar, una contrincante de menor nivel.