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La Señora Sentimiento en el corazón de Cuba y el mundo

Por: César Gómez Chacón

El 9 de junio de 2002, a los 74 años de edad, murió en su ciudad natal, La Habana, la gran cantante Elena Burke, a quien el pueblo cubano y el mundo conocieron y admiraron como “La Señora Sentimiento”.

Nacida como Romana Elena Burguez González, el 28 de febrero de 1928 en el barrio capitalino del Cerro, la Burke hizo una carrera artística que abarcó más de cinco décadas, y la convirtió en uno de los íconos indiscutibles de la música cubana de todos los tiempos.

Dueña de un peculiar registro de contralto con matices como pocas veces se han visto en la cancionística latinoamericana, y con notas de sobresaliente en sus interpretaciones a capela, Elena Burke fue una cantante excepcional y una intérprete capaz de transmitir con su voz todo tipo de emociones, desde la alegría contagiosa hasta la más profunda melancolía.

Debutó como aficionada en 1941 y a partir de 1943 transitó por grupos profesionales que dejaron profundas huellas en la historia musical cubana, como Las Mulatas de Fuego, Las Cancioneras, el Cuarteto de Facundo Rivero, y el de Orlando de La Rosa.

Un capítulo de oro fue su nómina en el muy carismático cuarteto “Las D’Aida”, con Aida Diestro a la cabeza, y junto a las también privilegiadas voces de Omara y Haydee Portuondo, Leonora Rega y Moraima Secada, entre otras.

Ya en 1958, consolidada como cantante, comienza su carrera como solista. Fue su incursión con éxito en el movimiento “filin” (feeling es sentimiento en inglés) surgido en la bohemia habanera a finales de los años 40, lo que le ganó ser reconocida mundialmente como la “Señora Sentimiento”.

Elena interpretó a los mejores compositores de su época y viajó por los escenarios y los medios de la mano de grandes personalidades de la música como Dámaso Pérez Prado, Isolina Carrillo, Adolfo Guzmán, Ernesto Lecuona, César Portillo de la Luz, Benny Moré, la orquesta Aragón, Eddy Gaytán, Meme Solís, Toña la Negra, Pedro Vargas, Nat King Cole, Libertad Lamarque, Bola de Nieve, Chucho Valdés, Silvio Rodríguez y Pablo Milanés.

Su carisma y una personalidad extrovertida, unidos a su gran sencillez y un contagioso sentido del humor, la hicieron una mimada por los medios de comunicación de Cuba y de los múltiples países a donde llevó su arte.

De las presentaciones internacionales, tanto como parte de las agrupaciones a las que perteneció, y posteriormente en su carrera como solista, dan cuenta sus éxitos en Canadá, Estados Unidos, España, México, Francia, Chile, Venezuela, Alemania, Bulgaria, Polonia y Japón.

Ya muy enferma, la Señora Sentimiento aún se presentaba en centros nocturnos habaneros y en programas de radio y televisión. En una de sus últimas apariciones, en silla de ruedas, hizo un memorable concierto en el Teatro Nacional de Cuba, donde interpretó magistralmente muchos de los éxitos de su amplio repertorio.

A 22 años de su paso a la historia, Elena Burke sigue cantando con aquella voz única y repartiendo su amplia sonrisa en los corazones de todos aquellos que la reconocen como una de las grandes leyendas de la canción cubana. Esa que todavía hace saltar los más profundos sentimientos.

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