El presidente cubano, Miguel Díaz-Canel Bermúdez, participó en el segmento de diálogo de alto nivel sobre Financiación para el Desarrollo durante el 78º período de sesiones de la Asamblea General de las Naciones Unidas.
En su intervención el mandatario exaltó la valiosa oportunidad de ese espacio para el intercambio abierto, la reflexión sobre el proceso alcanzado de la implementación del plan de acción Addis Abeba y la evaluación de las maneras más eficientes de cerrar la creciente brecha movilizando así la voluntad política y los recursos necesarios para lograr los objetivos de desarrollo sostenible para 2030.
‘‘Se necesitan acciones inmediatas para enfrentar con urgencia la deuda externa insostenible que arrastra la mayoría de las naciones en desarrollo hacia un abismo económico. Se necesita inmediatamente una solución inclusiva y efectiva con la participación de todos los acreedores para que los países del Sur, particularmente los países de ingreso medio con miles de millones de dólares de sus propios ahorros domésticos, inviertan en su desarrollo’’, resaltó el mandatario’’.
Agregó que los países desarrollados deben cesar de incrementar artificialmente la carga de exportación hacia aquellos mercados para países en desarrollo a través de tarifas injustificables y discriminatorias, para de esta manera crear un espacio para que las naciones en desarrollo creen industrias modernas que añadan valor a sus facilidades extractivas y agrícolas.
Díaz-Canel cerró su intervención planteando que el G77 y China espera que este diálogo fomente urgentemente la voluntad política para implementar lo que todos sabemos que es necesario para sobrepasar una de las crisis más complejas, de las que ha sido testigo la humanidad en la historia moderna.