Este lunes, desde el Palacio de la Revolución, el primer ministro Manuel Marrero Cruz, el vice primer ministro, Roberto Morales Ojeda, y el titular de Salud Pública, Dr. José Ángel Portal Miranda, comparecen en la Mesa Redonda para informar sobre las medidas adoptadas en Cuba para enfrentar la COVID-19, enfermedad provocada por el nuevo coronavirus SARS-CoV-2.
En Cuba existe experiencia para enfrentar cualquier tipo de epidemia
Al inicio del programa televisivo, el primer ministro, Manuel Marrero Cruz, mencionó los datos más recientes sobre la enfermedad COVID-19, provocada por el nuevo coronavirus que se ha ido expandiendo por todo el mundo.
Según los reportes hasta este lunes, está presente en más de 100 países, 12 de ellos en la región de las Américas. Han contraído la enfermedad la impresionante cifra de 109 695 personas y ha habido 3 811 muertes en todo el mundo. Esta cifra está constantemente actualizándose y, lamentablemente, crecerá, señaló Marrero.
Cuba tiene experiencia en el enfretamiento de pandemias
En Cuba existe experiencia para enfrentar cualquier tipo de epidemia como parte del sistema nacional de salud, “recientemente tuvimos la experiencia del ébola y el H1N1”, dijo el primer ministro.
Ante esta situación nuestro Consejo de Ministros se reunió en enero para aprobar el plan para la prevención y control del nuevo coronavirus, informó.
“Entonces, se comenzó a trabajar para implementar este plan en todo el país, incluyendo la capacitación que se requiere en el personal de salud. Atendiendo a la expansión en el mundo y las experiencias internacionales, el General de Ejército Raúl Castro, primer secretario del Partido, nos trasladó su preocupación y convocó a una reunión del Buró Político solo para abordar esta situación”, explicó.
En esa reunión fue tomado un grupo importante de decisiones, como actualizar el plan existente, que había sido aprobado en enero de 2020, con el fin de hacerlo más detallado y poder actuar ante cualquier caso que se presente.
Hospitales militares también tratarán posibles casos sospechosos en Cuba
Marrero dijo que se decidió sumar los hospitales militares del país –con excepción del Carlos J. Finlay, en el municipio de Marianao, en La Habana– a las instalaciones ya previstas para tratar los casos sospechosos, además de desarrollar reuniones territoriales en oriente, centro y occidente con los dirigentes provinciales y municipales, para presentarles el plan actualizado y evacuar inquietudes y preguntas.
“Una vez tomadas esas decisiones, nuestro presidente nos solicitó convocar un Comité Ejecutivo del Consejo de Ministros para analizar este tema, y el 5 de marzo se convocó a una reunión extraordinaria con este propósito.» Ese mismo día, en la tarde, se desarrolló una reunión extraordinaria del Consejo de Ministros con este punto como agenda.
Los gobiernos provinciales adoptan medidas para enfrentar el SARS-CoV-2
“El viernes 6 de marzo, la dirección del Estado y el Gobierno se trasladó hacia Santa Clara, para reunirse con los primeros secretarios del Partido, los gobernadores, jefes de regiones militares, delegados del Ministerio del Interior y los directores de Salud de las cinco provincias centrales, así como con los secretarios del Partido, presidentes de las asambleas municipales del Poder Popular, intendentes y directores de Salud de los 52 municipios que integran esas cinco provincias.
“El propio día se efectuó una reunión similar con las cuatro provincias occidentales y los 49 municipios que las integran, y se incluyó el Municipio Especial Isla de la Juventud. El sábado 7, cerramos esta primera etapa en la ciudad de Holguín, donde nos reunimos con las autoridades de las seis provincias orientales y los 67 municipios que las integran.
“En esos dos días, encabezados por el presidente de Cuba, un grupo de dirigentes nacionales y de las organizaciones políticas tuvimos contacto directo con 759 compañeros que de primera mano recibieron la explicación del Ministro de Salud sobre este plan actualizado; además, se efectuaron precisiones y se escuchó la opinión de los presentes.
“Fue un ejercicio con una explicación detallada que permite actuar con mayor rapidez ante cualquier caso que se presente. También permitió comprobar qué se ha hecho desde la base, como la capacitación, preparación e implementación del plan, con lo cual es mucho más sencillo su actualización”.