
Foto: Estudios Revolución
La ceremonia de juramentación de 32 nuevos embajadores que representarán a Cuba en diversas regiones del mundo tuvo lugar en el emblemático salón Portocarrero del Palacio de la Revolución, en La Habana.
El acto solemne, encabezado por el primer secretario del Comité Central del Partido Comunista de Cuba (PCC) y presidente de la República, Miguel Díaz-Canel Bermúdez, acogió a varias generaciones de diplomáticos cubanos, fieles continuadores del ejemplo de José Martí.
Por su parte, el embajador Rodolfo Benítez Verson expresó que «compartimos el privilegio e inmenso honor de ser Embajadores del pueblo revolucionario”.
Asimismo, repasó los valores que distingue la labor diplomática revolucionaria en otras tierras del mundo: «la austeridad, la modestia, la capacidad de flexibilidad táctica sin ceder nunca en los principios; el diálogo basado siempre en el respeto mutuo; la firme convicción de no negociar jamás bajo presión o amenaza, así como la promoción consecuente de la amistad y la solidaridad».
Foto: Estudios Revolución
“Cada diplomático cubano que habla en nombre de nuestro país, lo hace desde el inmenso prestigio que tiene la Revolución cubana. Esa es nuestra mayor fortaleza: el pueblo es el principal protagonista de nuestra diplomacia”, aseveró Benítez Verson.
En el acto, también, estuvo presente Esteban Lazo Hernández, presidente de la Asamblea Nacional del Poder Popular (ANPP); el primer ministro, Manuel Marrero Cruz, y el canciller Bruno Rodríguez Parrilla; así como otros funcionarios del Gobierno y diplomáticos cubanos, como el viceministro de Relaciones Exteriores, Carlos Fernández de Cossío, quien destacó la “alta responsabilidad” que significa representar a el archipiélago cubano en cualquier rincón del mundo.
Además, subrayó que «se representa a la Patria, a un pueblo noble, digno y abnegado; a la Revolución y al derecho soberano e irrenunciable de construir el socialismo”.
Fuente: Presidencia Cuba