El Nasalferón, fármaco desarrollado por el Centro de Ingeniería Genética y Biotecnología de Cuba (CIGB) y empleado hoy para enfrentar la Covid-19, podría usarse contra diferentes padecimientos respiratorios agudos, reveló una fuente autorizada.
En declaraciones de la directora general de la institución, Martha Ayala, su utilidad para tratar diversos padecimientos deberán quedar demostrados a través de estudios clínicos que ahora que se diseñan.
El medicamento es una formulación del Interferón Alfa-2b-humano recombinante para vía nasal, cuyas propiedades inmunomoduladoras y antivirales evitan la replicación del SARS-CoV-2, causante de la enfermedad, y fortalecen el sistema inmunológico.
La funcionaria recordó que, una vez probada su seguridad, esta elaboración tuvo un momento protagónico cuando la cepa Delta del nuevo coronavirus entró en el país y fue necesario incrementar la respuesta defensiva de la población.
En una entrevista concedida a la televisora multiestatal Telesur, Ayala refirió además que la inmunización por la vía nasal es una de las aristas desarrolladas por el CIGB desde hace más de 15 años con el desarrollo de una formulación para la hepatitis B crónica.
“Hay muchas personas con esta enfermedad en el mundo y tenemos una vacuna registrada desde el 2015 que se llama Hebervasnac”, dijo.
Agregó que dicho preparado es capaz de estimular la inmunidad innata en las mucosas, concepto que acompaña también al candidato vacunal anticovid-19 Mambisa.
Según comentó, con esta formulación de refuerzo ya se lleva a cabo un estudio clínico en su fase dos con individuos que padecieron el virus y a los que se les puede reforzar la inmunidad preexistente.
“Hemos podido demostrar que en personas vacunadas o convalecientes mejora la capacidad de los anticuerpos neutralizantes”, sostuvo.
Una vez que estén concluidos los estudios, añadió, podremos presentarnos ante la agencia reguladora nacional para que nos dé el autorizo de uso de emergencia, suceso que confió podría acontecer durante el primer trimestre del año.