Estás aquí

Día Internacional de las Personas con Discapacidad: Conciencia, derechos e inclusión

Ponentes de 14 países, con representación de los cinco continentes intervienen el evento que tiene por sede el Hotel Nacional, para compartir experiencias en el trabajo con personas con discapacidad y eliminar barreras de distinta índole.

La proclamación del 3 de diciembre como Día Internacional de las Personas con Discapacidad ocurrió en 1992.

Historia de la fecha

La Asamblea General de las Naciones Unidas adoptó esta resolución con un propósito claro: la promoción de los derechos y el bienestar de este colectivo en todos los ámbitos de la sociedad. Además, aumentar la conciencia sobre su situación en cada aspecto de la vida política, social, económica y cultural.

La fecha nació al final del decenio 1983 — 1992. Ese período constituyó un marco de acción para los gobiernos y las organizaciones, pues se implementaron programas y directrices con un enfoque renovado, cuya idea central fue la igualdad de oportunidades para todas las personas, sin distinción.

Este día internacional sirve como punto de encuentro anual para la evaluación de los progresos y los desafíos pendientes. Por eso cada 3 de diciembre se examinan las brechas que persisten en la implementación de normativas, y los Estados presentan sus avances en materia de accesibilidad universal y diseño inclusivo.

Hoy el acento reside en las barreras que la sociedad erige y debe eliminar, lo que refleja la evolución de esta conmemoración, que ha transitado de un modelo asistencialista al modelo social de la discapacidad.

Importancia de la conmemoración

La importancia de este día radica en su poder para visibilizar a una parte significativa de la población mundial. Más de mil millones de personas viven con alguna forma de discapacidad, según estimaciones de la ONU.

Muchas de ellas enfrentan obstáculos diarios que limitan su participación social efectiva y la conmemoración pone el foco sobre esta realidad, a menudo ignorada o minimizada.

Su celebración es fundamental para la promoción de una cultura de respeto y empatía, al tener en cuenta que  la sociedad requiere espacios de reflexión sobre la diversidad humana como un valor esencial.

En esta jornada se combate estereotipos y prejuicios y se educa a la ciudadanía sobre la necesidad de entornos accesibles y actitudes inclusivas desde la infancia.

En tanto, opera como un mecanismo de presión política, al recordar la obligación de los Estados de armonizar sus marcos jurídicos con la Convención sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad.

Además, la fecha empodera a las propias personas con discapacidad y a sus familias, al reforzar su sentido de comunidad y de capacidad colectiva para abogar por cambios.

Es, en esencia, una reafirmación anual de que los derechos humanos son universales e indivisibles.

Experiencia desde Cuba

Cuba cuenta con ejemplos notables de personas con discapacidad que alcanzaron el éxito con su talento y tenacidad. Su camino demuestra la posibilidad de sobreponerse a barreras físicas o sociales, no solo con determinación, sino también con oportunidades reales.

El deporte paralímpico constituye un escenario a destacar en este sentido. La legendaria corredora, Omara Durand, «puso el broche de oro a su extraordinaria carrera en los Juegos Paralímpicos de París 2024».  Su carrera activa culminó con 11 medallas paralímpicas, todas ellas de oro, solo por mencionar un ejemplo de su extraordinario palmarés.

En esta fecha vale recordar también a Tomasita Quiala, conocida como La reina del repentismo o La ciega maravillosa, una de las más importante exponente del repentismo y la décima en Cuba, fallecida a mediados de este año.

 

//llhm

Deja una respuesta