Por: Duanys Hernández Torres
La selección de béisbol femenino de Puerto Rico, ante la imposibilidad de celebrar la segunda Copa del Caribe, aceptó la invitación de jugar seis duelos en nuestro país.
En una intensa semana, con el primer juego celebrado en el estadio Changa Mederos, y el resto en el mítico Latinoamericano, Puerto Rico dominó en toda la línea a las anfitrionas cubanas.
Seis victorias con marcadores de 5-4, 8-0, 7-1, 13-7, 5-4 y 16-7, respectivamente demuestran la superioridad del equipo dirigido por Carlos Ferrer. La ofensiva fue el plato fuerte del equipo con un promedio de nueve carreras, y nueve indiscutibles por encuentro y solo par de errores por partido.
Cuba tuvo en la defensa su peor aspecto de juego con casi cuatro errores por duelos, incluidos cinco en el último enfrentamiento que costaron muchas carreras. Las jóvenes cubanas tienen que mejor a la defensa si aspiran a tener un buen torneo panamericano para menores de 23 años en Venezuela durante el venidero mes de agosto.
La ofensiva tampoco estuvo bien con menos de cuatro carreras por encuentro y apenas cinco inatrapables, por lo que los entrenadores tendrán bastante trabajo con las figuras más jóvenes
A pesar de las seis derrotas, Cuba pudo probar a figuras jóvenes que estarán en el panamericano de la categoría con destaque para Marian Verdecia, una lanzadora de apenas 16 años y Yusnavy Bonne. Este tope brindó esa posibilidad y demuestra que Cuba cuenta con una cantera de jugadoras que podrán reemplazar en un futuro las más establecidas.
Lo negativo es que se pierden seis juegos, justo frente a uno de los rivales directos en el campeonato mundial de la disciplina a celebrarse durante el mes de septiembre en Japón. Y salvo en el primer y quinto partidos los marcadores resultaron holgados.
Los partidos internacionales siempre son bienvenidos para las mujeres cubanas que llevan varios meses entrenando en la capital cubana sin roce ante rivales de consideración.
Seis derrotas a las que hay que sacarles muchas enseñanzas para tener un buen resultado en el panamericano juvenil y en el campeonato mundial. Puerto Rico no creyó en las anfitrionas.
¿Hará Cuba la cruz ante las boricuas en Japón? ¿Mejorarán los aspectos de juego en las principales competencias internacionales del año? Margarita Mayeta y compañía tienen trabajo por hacer.
El béisbol femenino de Cuba tiene grandes retos, pero las mujeres saldrán con la misma hidalguía de siempre. De eso estamos seguros.