El Ballet Nacional de Cuba (BNC) ofrecerá hoy una presentación que su directora general, Viengsay Valdés, calificó de histórica, ya que es la primera vez que esta emblemática compañía se presenta en Laos.
Aunque la primera bailarina ya actuó en 2004 y 2016 en el Salón Nacional de la Cultura en la capital laosiana, nunca antes lo había hecho acompañada por una representación tan numerosa del elenco. Valdés expresó su deseo de que en el futuro el número de participantes pueda ser aún mayor.
También, agradeció la oportunidad de bailar en Vientiane en el contexto de la conmemoración del 50 aniversario del establecimiento de relaciones diplomáticas entre Cuba y Laos, destacando la estrecha amistad entre ambas naciones.
Poco después de su llegada, los integrantes del BNC fueron agasajados en la Embajada de Cuba por representantes de la Asociación de Amistad Cuba-Laos, el Departamento de Diplomacia Popular del Partido Popular Revolucionario (PPRL) y miembros de la misión estatal.
Antes de la función de este domingo, la directora general del BNC realizó visitas de cortesía al vicepresidente de la Asamblea Nacional de Laos, Chaleun Yiapaoheu, y al jefe del Departamento de Relaciones Exteriores del Partido, Bpunleau Phandanouvong, ambos miembros del Comité Central del PPRL.
El Ballet Nacional de Cuba, declarado Patrimonio Cultural de la Nación en 2018, ofrecerá en Vientiane un programa representativo de su repertorio, con selecciones de los clásicos Don Quijote, Cascanueces y Carmen, así como piezas populares como Aguas primaverales, Loss, Esmeralda y Majísimo.
La presencia del BNC en Laos forma parte de una exitosa gira iniciada en China, donde participaron en el Festival Internacional de las Artes de Shanghai y ofrecieron dos funciones en Beijing. La gira continuó en Vietnam, con actuaciones en Hanoi y la ciudad portuaria de Hai Phong.
Para Viengsay Valdés, regresar a Laos siempre es motivo de alegría, ya que considera a este país como su segunda patria. «Cuando me preguntan por mis primeros recuerdos, pienso inmediatamente en Laos, adonde llegué en brazos de mi madre con apenas tres meses de nacida», declaró la bailarina a la televisión laosiana durante su segunda visita a Vientiane en 2016.
Sus primeros pasos, tanto en la vida como en el baile, los dio precisamente en Laos, donde a mediados de la década de 1970 sus padres, Roberto Valdés y Clara Herrera, fueron nombrados embajador y encargada de Asuntos Culturales, respectivamente, en la primera misión diplomática de Cuba en el país.
Con apenas tres años de edad, actuó por primera vez en un acto en la Embajada para conmemorar el natalicio del Héroe Nacional José Martí, y comenzó a cosechar aplausos al bailar el Lam Vong (danza en círculo), uno de los bailes folclóricos más populares de Laos.
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