Por: Alicia Cascaret
Haití logró su independencia de la metrópoli francesa poniendo fin a la esclavitud colonial. Fue la segunda nación americana en independizarse, después de Estados Unidos y se considera, asimismo, la primera república “negra” del mundo y una de las pocas rebeliones de esclavos culminada con éxito. La esclavitud, base de la economía, fue abolida y el país sufrió un durísimo embargo comercial, así como un bloqueo diplomático tras la independencia.
Mundo 20/20 se complace en proponerle un análisis de la situación en Haití, con la participación del presentador Julio Mejía, de Prensa Latina, y el profesor José F. Piedra, de la Cátedra de Estudios del Caribe de la Universidad de La Habana, especialista sobre el tema.
Piedra contextualiza la situación haitiana desde su independencia de la metrópoli francesa y recalca que fue en 1804 la primera revolución negra en el mundo, anticolonialista, independentista, antiesclavista y solidaria.
Luego se refiere a la economía, los sucesivos golpes de estado y las diversas invasiones estadounidenses y ocupación, así como las bandas criminales y los continuos desastres naturales que han golpeado en los últimos años al país caribeño.
Considera que las ayudas humanitarias y la “contribución al desarrollo” han hecho muy poco, o nada, porque no llegan al pueblo haitiano y se quedan en manos de la cúpula política corrupta.
En el programa se habla de la necesidad de un diálogo nacional entre las partes y no el despliegue militar extranjero como la solución a los problemas. Es la vía haitiana: la solución que encuentren a través del diálogo y la unidad las fuerzas políticas y los movimientos sociales que están interesados en sacar adelante al país.
Piedra señala que la experiencia y la historia demuestran que ninguna intervención militar puede sacar al país caribeño de la situación que atraviesa, si no se tiene en cuenta a las fuerzas políticas autóctonas. Coincide así con el Grupo de Puebla, que también aboga por una solución por la vía haitiana.
En Mundo 20/20 se habla de Caricom, Celac y otras organizaciones regionales, que han mantenido una postura de solidaridad y búsqueda del diálogo. “La posición de CARICOM ha sido siempre la de respetar la autodeterminación del pueblo haitiano”, señala Piedra.
En cuanto a la OEA, reitera su política entreguista e intervencionista, contraria a la autodeterminación de las naciones y alineada con los patrones dictados por la potencia imperialista de Estados Unidos.
La corrupción transversaliza todo el panorama político de la nación caribeña y, mientras perdure el entreguismo de la élite haitiana, el pueblo tendrá que seguir luchando.
Ante la situación actual, el experto destaca la resistencia del pueblo haitiano, que se ha puesto de manifiesto una vez más. “Contrariamente a los que invocan intervenciones, el pueblo haitiano se mantiene en las calles, defendiendo sus derechos y renuentes a recibir una nueva intervención extranjera.
El entrevistado muestra su optimismo ante la postura del pueblo, de cara a un futuro mejor, si se sigue respetando su autodeterminación.
