
Fotos por Julio Larramendi
Más de 50 mil habaneros, en representación de toda Cuba, patentaron, a los pies de la estatua de Simón Bolívar en la Avenida de los Presidentes, en el céntrico barrio del Vedado, el respaldo invariable de la mayor de las Antillas hacia la República Bolivariana de Venezuela, que sufre la amenaza constante de una agresión imperialista.
Liderados por Miguel Díaz-Canel, Primer Secretario del Comité Central del Partido Comunista de Cuba (PCC) y Presidente de la República, el pueblo allí reunido y los participantes en el III Encuentro Internacional de Publicaciones Teóricas de Partidos y Movimientos de Izquierda rechazaron las maniobras de Estados Unidos por provocar un escenario bélico en el país sudamericano, con consecuencias imprevisibles para la paz y la seguridad en la región.
Díaz-Canel entregó a Pedro Infante Aparicio, primer vicepresidente de la Asamblea Nacional de Venezuela, un cuadro y copia del Libro de Firmas en apoyo a la Revolución Bolivariana, encabezado por la rúbrica del General de Ejército Raúl Castro Ruz, líder de la Revolución cubana, junto a cuatro millones 338 mil cubanos, los cuales encarnan también la forma simbólica del Comandante en Jefe Fidel Castro Ruz.
Infante Aparicio saludó al noble, heroico y solidario pueblo de Cuba que una vez más abraza la causa bolivariana en contra de las acusaciones xenófobas y las campañas de mentiras promovidas por la actual administración norteamericana con el fin de legitimar su intentona injerencista.
De igual manera agradeció la actitud firme y decidida de Díaz-Canel, al defender ante el mundo la urgencia de impedir la intervención militar estadounidense en la patria de Bolívar y Hugo Chávez.
Acusó las ejecuciones extrajudiciales perpetradas por las fuerzas norteamericanas en aguas del Caribe para reforzar su retórica belicista para subvertir el orden interno y expropiar los recursos naturales de la nación.
Cuba y Venezuela comparten la misma trinchera de moral, de dignidad, de lucha y de victoria ante el imperialismo norteamericano, añadió.
Roberto Morales Ojeda, miembro del Buró Político y secretario de Organización del Comité Central del PCC, resaltó en el acto la concreción de la voluntad de un pueblo que no claudica en la lucha por defender a ambas tierras como una sola Patria.
Insistió en que Cuba y Venezuela son una sola alma, y un alma no se divide, no se vende, no se rinde, porque lo que hoy está en disputa allí es la lucha por la dignidad latinoamericana.
De igual manera, Morales Ojeda expresó la convicción llegada de la amistad y unidad de Fidel Castro y el Comandante Hugo Chávez, de que nada ni nadie detendrá la Revolución Bolivariana, y por tanto, no podrá el imperialismo vencer el honor ni la moral de los pueblos.
Con Martí (Héroe Nacional de Cuba) hoy venimos a pedir a Venezuela un puesto en la milicia de la paz, concluyó.
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