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Abel Geronés: “cada canción que escribo es una parte de mi historia”

Abel Geronés nos abre las puertas de su universo musical en una entrevista donde reflexiona sobre su trayectoria, su evolución artística y personal, y el compromiso detrás de cada canción. Desde sus años de formación hasta sus proyectos más recientes, el cantautor revela cómo ha construido una carrera fiel a sus principios, fusionando sensibilidad, conciencia social y una profunda conexión con la paternidad. Un testimonio inspirador para quienes creen en la música como forma de expresión y transformación.

Por Alejandro Pérez Zerquera

¿Recuerdas cómo empezó tu relación con la música? ¿Qué fue lo primero que te enganchó de ella?

La música siempre estuvo ahí. Aunque soy el primer músico profesional de mi familia, no soy el primero en amarla. Mi papá tocaba guitarra de manera autodidacta, y las noches de mi infancia estaban coloreadas de trova. Creo que lo primero que me enganchó de la música fue cantar, me pasaba la vida cantando e «inventando canciones».

Pasaste por escuelas de música desde niño, ¿cómo te marcó esa etapa a la hora de escribir canciones y tocar hoy?

Mi paso por el sistema de enseñanza artística fue maravilloso, sobre todo porque conocí amigos que hoy son mi familia y aún me acompañan en este viaje. Pero realmente el plan de estudios en Cuba no está dirigido a potenciar el talento de los muchachos que escriben canciones. La composición la he ido desarrollando de manera autodidacta. Lo que pasa es que siempre escribí canciones, y me gusta escuchar. Analizar músicas nuevas y diversas.

En tus inicios estuviste en varias agrupaciones y acompañaste a artistas conocidos, ¿qué te dejaron esas experiencias?

Cada agrupación de las que he formado parte ha dejado algo en mí. Siempre les agradezco en cada oportunidad, porque el camino andado me trajo hasta aquí y me encanta quién soy y dónde estoy. A grandes rasgos, soy un poco de cada una de esas agrupaciones. A Waldo, la canción; a Tania Pantoja, la importancia de conectar con el público; a Polito, a David Torrens, Habana en Clave… A todos… siempre van conmigo.

¿Qué te empujó a lanzarte como solista? ¿Te costó tomar esa decisión?

Llegado el momento, tenía las canciones, tenía deseos de cantar y de probar mis alas, tenía los músicos, y algunas situaciones particulares con la repartición no equitativa de los pagos me hicieron decidirme a iniciar mi carrera en solitario. Fue una decisión difícil, sobre todo porque había que tomarla de forma radical. Decidí no tocar con nadie más para dedicar el 100 % de mis esfuerzos a mi proyecto. ¿Difícil? Sí, pero hermoso.

Tu primer disco llegó con una nominación al Cubadisco. ¿Cómo viviste ese momento?

El disco Una parte de mí me valió dos nominaciones a Cubadisco: Ópera Prima y Canción Contemporánea. Te confieso que me sentí despojado cuando no gané ninguna de las categorías. Pero, sobre todo, las nominaciones me sirvieron como reafirmación, me otorgaron la certeza de que había tomado la decisión correcta.

Después llegó Carrusel, que suena más maduro y personal. ¿Qué querías contar con ese álbum?

Con Carrusel sucedió algo especial. Todas las canciones eran de la etapa específica que estaba viviendo. Eran, son canciones felices, de luz, y creo que ese es el rasgo más lindo que tiene el disco. La producción de Vicente Alejandro Trigo, los invitados, los ejecutantes… Es un disco en el cual nos planteamos que la excelencia en todas las líneas primara.

Últimamente se ha hablado mucho de tu faceta como papá en tus canciones. ¿Cómo nació esa idea del “Papá Astronauta”?

Papá Astronauta es una nueva línea de trabajo en la cual convergen armónicamente mis dos grandes proyectos: mi carrera y mi familia. Cuando me convocó la RIAM descubrí la magia que hay en comunicar lo que se siente e intentar plantar una semilla que va a repercutir positivamente en la vida de los demás. Gracias al profe Julio César González Pagés, descubrí que, sin intentarlo, estaba haciendo activismo acerca de la paternidad responsable.

Actualmente estás trabajando en Esquizofonías, un proyecto muy diferente a los anteriores. ¿Qué nos puedes adelantar?

Esquizofonías está siendo un disco difícil, sobre todo porque siento que no soy el mismo que en 2018 cantaba canciones solo de amor. Tengo otro estado de consciencia, y ya no me son ajenos los eventos que marcan la vida en el país. Entonces… este disco tiene canciones de amor, pero tiene también un corte más político, una sonoridad diferente de la que traía. Más étnico, más caribe, más yo, el yo de hoy jajajajaj.

También has trabajado como comunicador en radio y televisión. ¿Qué te aporta esa faceta a tu vida como artista?

Descubrí en cierto punto que amo comunicar tanto como amo cantar. La radio, de la mano de Manuel Ramírez Heras. La televisión, de la mano de Yahumara Roque, me han permitido explotar, enamorarme y disfrutar de esa faceta que no sabía que tenía. Ojalá sigan contando conmigo para proyectos de este orden.

Si tuvieras que explicar tu estilo a alguien que no te ha escuchado nunca, ¿qué le dirías?

Si tuviese que explicarle a alguien, le diría lo que no soy jajajaj. No soy Sabina, pero no soy Melendi. Es algo que he pensado mucho, porque estoy en un limbo musical en el que no soy trovador, no soy Silvio, pero no soy un artista pop como Reik. Creo que soy el eslabón que enlaza estos dos polos de los que he estado hablando.

Si pudieras hablar con el Abel que empezaba a estudiar guitarra siendo niño, ¿qué consejo le darías hoy?

Al Abel de hace algunos años le diría que no piense tanto las cosas, que se lance. El NO ya lo tienes. Lo que puedes ganar es el SÍ, que es un punto de cambio, de quiebre cada vez.

Para finalizar, ¿qué consejo le darías a los jóvenes que están empezando ahora en la música, con tantos retos y caminos posibles?

A los jóvenes, el camino de lo bien hecho es difícil, escabroso, pero es hermoso. El éxito no te lo va a regalar nadie, tienes que construirlo todos los días. Y cada canción que escriban no la den por terminada hasta que estén convencidos de que es el máximo de su capacidad, sea buena o sea mala… que sea lo mejor que pueden dar.

//sls

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